En las grandes empresas la inversión en beneficios sociales en los Departamentos de Recursos Humanos va ganando adeptos.
Pero en las pequeñas empresas y micropymes estas implementaciones son más difíciles de considerar puesto que puede ser el mismo empleado el que realice el trabajo y además haga funciones de recursos humanos.
Lo cierto es que beneficios sociales y pyme no son cuestiones incompatibles.
Cada vez son más las pequeñas empresas que contemplan los beneficios como una oportunidad que los lleve a conseguir un mejor rendimiento en su empresa.
Los beneficios sociales son un conjunto de servicios personalizados y complementarios del salario del empleado.
La empresa empleadora invierte en sus empleados a través de servicios que están destinados a mejorar el bienestar y la conciliación de estos, lo que redundará en un beneficio para la productividad.
Los principales servicios son:
- Tickets restaurante. Para resolver de manera saludable y variada la comida en la pausa laboral.
- Cheques guardería. Para que los empleados con niños pequeños puedan trabajar tranquilos.
- Tarjeta transporte. Para solucionar el problema del transporte y llegar sin el estrés que implica el coche.
- Seguros de salud. Para que el empleado trabaje con la tranquilidad que implica tener su salud asegurada.
- Formación. Para conseguir una plantilla más especializada y formada, capaz de afrontar nuevos retos.
Todos estos servicios cuentan además con ventajas fiscales:
-Están exentos de IRPF, siempre dentro de los límites establecidos.
-Cotizan a la Seguridad Social.
-Son 100 % deducibles del impuesto de sociedades.